Autoridades buscan determinar destino del cadáver de terrorista

0
1236
Abimael Guzmán y su esposa Elena Iparraguirre
Abimael Guzmán y su esposa Elena Iparraguirre

Sigue la incertidumbre. Aun no se determina si el genocida más grande en la historia del Perú, Abimael Guzmán, será enterrado o será incinerado.  El Poder Judicial rechazó la petición formal que impuso Elena Iparraguirre Revoredo, esposa del occiso, y de esta manera no recibirá los restos del hombre con quien se encargó de sembrar el terror a punto de explosiones y asesinatos.

SU ESPOSA NO PODRÁ RECLAMAR LOS RESTOS DE ABIMAEL GUZMÁN, PERO SÍ SE CONFIRMÓ QUE ES EL CUERPO DEL GENOCIDA

La también conocida como camarada “Miriam”, condenada a cadena perpetua, presentó el último sábado 11 de septiembre un hábeas corpus cante la Corte Superior de Justicia de Lima mediante su abogado, Alfredo Crespo Bragayrac, con el objetivo de que le entreguen próximamente el cuerpo del delincuente terrorista.

Ella justificó la solicitud por la presunta vulneración a la integridad personal, libertad religiosa y su derecho para enterrar al mayor genocida del Perú.Sin embargo, el Primer Juzgado de Investigación Preparatoria Permanente del Callao declaró infundado su demanda de proceso constitucional.

Leer también [Castillo sigue de gira en Cajamarca, desvinculado del tema Guzmán]

Asimismo, resolvieron realizar una investigación para recibir el dicho del fiscal provincial emplazado y constituirse en el despacho de la Tercera Fiscalía Provincial Penal Corporativa del primer puerto con el objetivo de recabar las copias respectivas con la muerte del alias camarada “Gonzalo.

De acuerdo con el órgano jurisdiccional, no consideraron argumentos que sustenten una vulneración a los derechos de Iparraguirre. Su fundamento está basado en suposiciones de lo que ocurriría a futuro, pues se piensa que el lugar de su entierro se convertiría en un punto de culto para sus seguidores.

Cabe resaltar que Iris Yolanda Quiñonez Colchado, camarada “Bertha”, acudió al día siguiente, domingo 12, a la Tercera Fiscalía para presentar una carta poder que le entregó Elena y que también pedía el cadáver de Guzmán. Pese a ello, las autoridades también se lo prohibieron por no ser un documento válido.

Cambian de penal a Elena Iparraguire

En medio del revuelo por el deceso de Abimael, ocurrido el 11 de septiembre, se conoció que su esposa Elena Iparraguirre realizó llamadas telefónicas desde el penal Virgen de Fátima de Chorrillos, lugar donde purga su cadena perpetua. Por esas comunicaciones la trasladarán a una prisión de máxima seguridad.

Así lo confirmó el Instituto Nacional Penitenciario (INPE), entidad del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos, mediante un comunicado. En este expresan que a la sentenciada se le dispuso la incomunicación y el inicio de un proceso disciplinario por “vulneración de la seguridad y de las normas penitenciarias”.

“Frente a las llamadas telefónicas realizadas el pasado 11 de setiembre por parte de la interna Iparraguirre Revoredo, las cuales ensalzan hechos ilegales vinculados con el terrorismo y, por lo tanto, vulneran las normas de seguridad penitenciaria… Hoy (ayer) se dispuso el traslado de la interna a un penal de máxima seguridad”, expresaron en el mensaje.

El INPE se mostró rígido ante los diversos actos de indisciplina que vulnerarían la democracia y el Estado de derecho. Culminaron su escrito sin mencionar cuándo, a qué penal o a qué lugar será llevada la terrorista, quien contrajo matrimonio con Guzmán en 2010, cuando ya purgaban condena.

Congresistas verificaron cadáver del genocida

Durante la mañana del lunes, la congresista de Alianza para el Progreso, Gladys Echaíz y presidenta de la Comisión de Justicia del Congreso, llegó a la morgue del Callao para corroborar que el cadáver en realidad era de Abimael Guzmán Reinoso. Con ello, las dudas estarían esclarecidas.

Sostuvo que, con los legisladores Norma Yarrow (Avanza País), Alejandro Cavero (Avanza País), Yorkel Alcarraz (Somos Perú), Karol Paredes (Acción Popular) y Rosángela Barbarán, tuvieron muestras fotográficas y estuvieron en el lugar donde se encuentra. Es así que ratificaron su real deceso.

La misma suerte no tuvo el congresista José Cueto, de Renovación Popular. Él llegó al mismo punto, pero las autoridades le impidieron ver el cuerpo. Por su parte, la Policía Nacional del Perú (PNP) indicó que las pericias de diseño facial del terrorista confirmaron que sí se trata de líder de Sendero Luminoso.