Varios deportistas ahora festejan sus logros en el campo de juego con un movimiento que imita al del presidente electo; inclusive, en la UFC lo hicieron con el magnate neoyorquino en primera fila
El baile que el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, hacía en sus mítines durante la canción Y.M.C.A. de Village People ha inspirado en los últimos días a diferentes deportistas del país en sus celebraciones sobre el terreno de juego. Uno de los ejemplos más recientes es el de Christian Pulisic, capitán de la selección de fútbol de Estados Unidos y que este lunes celebró el primero de sus dos goles en el triunfo por 4-2 sobre Jamaica imitando el baile de Trump.
También el sábado se dio otra celebración similar en la UFC por parte de Jon Jones, que derrotó por KO a Stipe Miocic en la categoría de peso pesado. Jones bailó a pocos metros de Trump, ya que el presidente electo acudió al Madison Square Garden de Nueva York para presenciar en primera fila esa velada de la UFC.
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Especialmente popular ha sido el baile de Trump en la NFL, donde Nick Bosa, de los San Francisco 49ers, no solo lo imitó para celebrar recientemente un placaje sino que semanas antes ya había causado controversia por llevar una gorra con el lema MAGA (Hagamos que Estados Unidos vuelva a ser grande).
En la NFL también han celebrado con el baile de Trump otros jugadores como Brock Bowers (Las Vegas Raiders), Za’Darius Smith y Malcolm Rodríguez (Detroit Lions) y Calvin Ridley y Nick Westbrook-Ikhine (Tennessee Titans).
El origen del baile de Trump
El paso de baile de Trump no es algo reciente. Durante la campaña electoral del presidente electo se viralizó un movimiento que él mismo realizaba en sus mítines. Este gesto, que consiste en un suave balanceo de cuerpo acompañado de movimientos de brazos como si estuviera marcando un ritmo, se convirtió rápidamente en un fenómeno en plataformas como TikTok.
En la parte final, el paso suele culminar con un gesto similar a un golpe de golf, dado que el líder republicano es un frecuente jugador de ese deporte. La popularidad de estos bailes se disparó tras la victoria de Trump y ahora es repetido no solo por sus seguidores, sino también por diversas figuras públicas, incluyendo deportistas de élite.