La población católica de Puno acudió de forma masiva a la plaza Mayor para participar de los actos religiosos por el día central de la festividad en honor a la Virgen de la Candelaria. Sin embargo, la celebración eucarística se vio interrumpida por un grupo de manifestantes.
Esta situación obligó a los miembros de la hermandad, a guardar rápidamente la imagen de la virgen de la Candelaria hacia el interior de la Basílica Menor de la Catedral. Los manifestantes arengaron frases en contra del obispo de Puno, Jorge Carrión Pavlich, a quien acusan de haber traicionado al pueblo de Puno, por haberse reunido con el presidente del Consejo de Ministros, Alberto Otárola.
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Algunos devotos se vieron preocupados por la agresividad de los manifestantes y se refugiaron en la catedral y otros decidieron retirarse del lugar. Ante esta situación, la Policía Nacional actuó rápidamente para evitar confrontaciones