DEBIDO A LOS PROBLEMAS ECONÓMICOS DE DICHO PAÍS DERIVADOS DE LA CRISIS ENERGÉTICA
La consultora Gas Energy Latin America ha advertido que Bolivia enfrenta una crisis energética que podría desencadenar la migración de más de un millón de ciudadanos hacia el Perú.
Este éxodo sería una consecuencia directa de la caída en la producción de gas natural, que es crucial para la economía boliviana.
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Álvaro Ríos, exministro de Hidrocarburos y actual titular de la consultora, explicó que esta crisis se debe a la falta de inversiones en exploración y producción. La estatal boliviana YPFB no cuenta con los recursos para enfrentar la declinación acelerada del gas y los líquidos asociados, lo que compromete la estabilidad energética del país.
Ríos señaló que Bolivia ha sido incapaz de atraer la inversión privada, a diferencia de Perú, que ha fomentado este modelo en su sector energético. Este es un factor clave en la crisis, ya que la inversión privada es fundamental para asumir los riesgos de exploración y evitar el colapso energético.
Se prevé que para 2029 Bolivia comience a importar gas, debido a la falta de producción interna. Esta dependencia del exterior no solo afectará su economía, sino que también provocará un deterioro aún mayor en la calidad de vida de sus ciudadanos.
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Ante esta perspectiva, un éxodo masivo de bolivianos hacia el Perú parece inevitable. La proximidad geográfica y las mejores condiciones económicas en territorio peruano convierten a este país en el principal destino de quienes huyen de la crisis.
Para Perú, este fenómeno representa un desafío. Recibir a más de un millón de migrantes requerirá una respuesta política y económica que garantice su integración sin afectar la estabilidad del país.
La situación que vive Bolivia recuerda la crisis venezolana, donde el colapso energético impulsó una migración masiva. Perú deberá prepararse para afrontar este reto si la crisis boliviana no se revierte.
