Ziu Le Pon Choy fue intervenida en su policlínico de la calle Lazareto, en el distrito de San Martín de Porres, por estafar a las personas con el cuento de que en 10 días podía sanarlos del coronavirus. Ella, sabiendo que tiene el coronavirus, escupió a los agentes para evitar que la detengan.
La mujer recibía a otros pacientes contagiados de COVID-19 y les prometía curarlos en poco tiempo. En su establecimiento se encontraban otras 12 personas, quienes también dieron positivo en las pruebas rápidas que se les aplicó.
Según el comandante José Antonio Celadita, la mujer se presentaba como una presunta enfermera, pero no contaba con ningún estudio profesional. Ella se negó a abrir la reja del local, por lo que tosió, escupió y estornudó directamente a los uniformados.
Al tratarse de pacientes con la pandemia, no pudieron ser trasladados a la dependencia policial de la zona. La policía clausuró el policlínico y llevó a los implicados a sus viviendas para que acaten la cuarentena.
El caso se presentó en forma de denuncia ante el Ministerio Público para que empiecen a realizar las diligencias del caso según los protocolos del estado de emergencia. La acusada estaría inmersa en varios delitos.
