Natalie Wood, la misteriosa muerte de la estrella de Hollywood

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Natalie Wood
Natalie Wood

Comenzó su carrera en el cine como cualquier niña que sueña con convertirse en una estrella. Lo logró,  Natalie Wood tuvo la posibilidad de pasar a la historia como uno de los grandes nombres de la época dorada de Hollywood y su primera nominación a un Óscar fue cuando apenas tenía 18 años. Sin embargo la muerte llegó muy pronto.

AÑOS DESPUÉS SU ESPOSO, ROBERT WAGNER,  CONFESÓ QUE MINTIÓ EN SU DECLARACIÓN SOBRE LA MUERTE DE LA ACTRIZ

Su fallecimiento se dio en circunstancias tan extrañas que Natalie Wood pasó a ser la protagonista de uno de los misterios más grandes del siglo pasado y, en consecuencia, su carrera como actriz quedó sepultada, solo viva en el recuerdo de aquellos fanáticos de los clásicos del cine

Wood nació en 1938 en una familia de inmigrantes rusos y, con apenas 4 años, fue descubierta por un director que decidió darle tanto a ella como a su madre un papel en una de sus películas. Esos fueron los primeros pasos en un camino que solo se dirigiría hacia arriba.. Más tarde, en una actriz madura cuyo trabajo era disputado por los productores más destacados del cine, quienes llegaron a compararla con Elizabeth Taylor.

Los picos más altos de su fama se dieron cuando interpretó a Judy en Rebeldes sin causa, acompañada por el legendario James Dean; y, seis años más tarde, cuando le dio vida a María en la adaptación a la pantalla del musical West Side Story

La época dorada de Hollywood estuvo marcada por la belleza, el talento y el glamour, y a Natalie Wood no le faltaban ninguna de las tres cualidades. Tuvo varios galanes entre ellos estaban Elvis Presley, Nicky Hilton y su codiciada coestrella, James Dean. Pero su verdadero amor fue Robert Wagner, con quien se casó, se divorció y -tras un corto matrimonio con otro hombre- se volvió a casar.

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A lo largo de sus 43 años, Natalie estuvo involucrada en los dramas y polémicas, le encantaba estar en yates privados, gigantescas mansiones, paseos alrededor del mundo y exclusivas fiestas en donde se codeaban los mejores artistas del momento.

 

La extraña muerte de Natalie Wood

El año era 1981 y la actriz se encontraba enfocada en su próximo proyecto cinematográfico. Wood, de 43 años, iba a protagonizar la película Brainstorm junto a Louise Fletcher, Cliff Robertson y Christopher Walken. Con este último llegó a desarrollar una relación bastante amistosa, tanto como para invitarlo a pasar un par de días en un yate junto a su marido.

Lo que inició como un divertido viaje hacia la paradisíaca isla de Santa Catalina -ubicada al frente a la costa del sur de California- terminó con una pelea a los gritos y la muerte “accidental” de la actriz, cuyo cuerpo fue hallado en el mar con lastimaduras en las extremidades y una abrasión en el cuello.

La situación se volvió aún más extraña cuando más de treinta años después se modificó la caratula del caso y pasó de “ahogo accidental” a “ahogo y causa indeterminada”.

El día del accidente, ella, su marido y Walken cenaron en un lujoso restaurant y acompañaron la comida con una buena cantidad de vino. Una vez en el yate, Natalie decidió que era hora de irse a dormir mientras los dos hombres prefirieron charlar un rato más. Pero, la conversación rápidamente se transformó en un griterío y terminaron envueltos en una gran discusión – centrada en la carrera de la actriz- que, supuestamente, terminó cuando cada uno se fue a dormir. Fue en ese momento que Wagner descubrió que su esposa no estaba en la habitación. Recorrió todo el yate en vano hasta que descubrió que también faltaba el bote de emergencia. A las pocas horas, Wood apareció muerta.

A simple vista, la evolución de los hechos era evidente y Natalie habría fallecido víctima de un trágico incidente provocado por los nervios de haber escuchado la severa pelea entre su colega y su marido, aumentados por el alto consumo de alcohol. Pero no todos creen lo mismo. En 2011, las teorías conspirativas aumentaron cuando las autoridades policiales decidieron reabrir el caso.

La incógnita principal que surgió fue que, quienes la conocían, sabían que ella le tenía terror al agua. ¿Por qué iba a querer subir a un bote sola en medio de la noche? Asimismo, los moretones y los rasguños que tenía en el cuerpo parecían coincidir con un forcejeo previo a su caída al mar. Y, por último, la muerte fue definida cerca de las 12 am y recién reportaron su desaparición a la 1.30 de la mañana. La conclusión más lógica frente a estas pistas indica que ninguno de los dos hombres dijo la verdad al hablar con la Policía.

Muchos apuntaron a Wagner, años después, cuando él rondaba los 90 años, admitió en sus memorias haber mentido en las declaraciones a las autoridades durante aquella tormentosa noche de noviembre. Él y Natalie discutieron horas antes de que ella muriera. Sin embargó, dejó en claro que no tenía nada que ver con su desaparición. Aunque muchos le creyeron, otros conservan las sospechas hacia el aparentemente inocente marido.

Otras teorías incluyen una aventura entre Natalie y su coestrella, que habría desembocado un crimen provocado por los celos. El manto que envuelve el hecho está plagado de hipótesis, especulaciones y opiniones. Pese a eso, nada se confirmó y el caso se mantiene como una gran incógnita.