POR LA PRESUNTA COMISIÓN DE LOS DELITOS DE TERRORISMO Y TRÁFICO ILÍCITO DE DROGAS
Entre los acusados se encuentran Elena Iparraguirre y Osman Morote
Para la jornada de este lunes, el Poder Judicial (PJ) dictará sentencia contra la cúpula de Sendero Luminoso tras un juicio oral que comenzó en 2021, por la presunta comisión de los delitos de terrorismo y tráfico ilícito de drogas.
La sentencia por el llamado ‘caso Perseo’ será dictada por la Cuarta Sala Penal de Apelaciones Nacional de la Corte Superior Nacional.
En este proceso, que comprende a Elena Iparraguirre, considerada la ‘número dos’ de Sendero, y a otras 43 personas, también se incluyó a Guzmán hasta su muerte en prisión, el 11 de septiembre de 2021.
Como se recuerda, la Fiscalía solicitó que se condene a cadena perpetua a todos los integrantes de la cúpula senderista y a 20 años de cárcel a los demás imputados, a los que atribuye los delitos de afiliación a una organización terrorista y tráfico ilícito de drogas para financiar actividades terroristas.
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Movadef y el narcotráfico
La acusación fiscal señala que el Movimiento por Amnistía y Derechos Fundamentales (Movadef), una agrupación política que intentó inscribirse legalmente ante el Jurado Nacional de Elecciones (JNE) en los últimos años, actuó bajo las órdenes de Sendero Luminoso y recibió financiación de actividades del narcoterrorismo.
El juicio también alcanzó a los senderistas como María Pantoja, Osmán Morote, Margot Liendo, Victoria Trujillo y Florindo Flores Hala. El mismo cargo, en su calidad de miembros del Comité Permanente Nacional del Movadef, a Alfredo Crespo, Fernando Olórtegui, Oswaldo Esquivel, Juan Ríos, Estela Guillermo Álvarez, y Nerida Espinoza, entre otros.
En 1992, Guzmán y los principales cabecillas de Sendero Luminoso fueron detenidos por la Policía y desde entonces fueron condenados a diversas condenas por terrorismo, que incluyeron la cadena perpetua en el caso del fundador y los principales líderes.
Tras la detención de los cabecillas ‘históricos’, los remanentes de Sendero se concentraron en la selva montañosa del sur del país, por donde se desplazan hasta el momento en alianza con el narcotráfico, según afirman las autoridades peruanas.